Tipos de Coordinaciones

 

La Coordinación es una capacidad presente en todos los ámbitos de la vida, desde las acciones mas simples, hasta las mas complejas como las deportivas.

Se manifiesta en la vida cotidiana cuando caminamos, escribimos, sorteamos un obstáculo etc. En el deporte, su importancia se multiplica: el rendimiento de un atleta no depende únicamente de la fuerza, velocidad y resistencia, sino también como organiza y sincroniza sus movimientos, distintos tipos de coordinaciones como la Inter e Intramuscular, la Dinámica General, la Óculo Manual y Pedal, la Fina y Gruesa, actúan de manera integrada para la ejecución de una acción motriz sea precisa, eficiente y adaptada a cada situación. Por eso, entrenar y potenciar estas formas de coordinación no solo es clave para alcanzar un mejor nivel deportivo, sino también para desenvolverse con seguridad y eficacia en la vida diaria.

Definiciones de Coordinación:

Meinell y Schnabel (1987): capacidad de organizar y regular procesos de movimientos parciales dentro de un acto motor global en función de un objetivo determinado.

Grosser y Neumaier (1986): la interacción armoniosa del sistema nervioso central y la musculatura esquelética en el proceso de ejecución de movimiento.

Hirtz (1985): capacidad de dirigir con eficacia la actividad motora en situaciones previsibles e imprevisibles.

Coordinación Intermuscular: capacidad de varios músculos (agonista, antagonista y sinergista) para trabajar en armonía durante un movimiento. Sincronizar diferentes músculos en una acción compleja, se vincula con la técnica y la eficacia motriz. Ejemplos: Gimnasta en Artística en anillas, suelo y barra. Futbolista con pases y remates al arco.

Coordinación Intramuscular: capacidad de un mismo musculo para reclutar de forma eficiente sus fibras y unidades motoras. Mejorar la activación máxima dentro de un musculo, se vincula con la fuerza máxima y potencia. Ejemplos: Halterofilio en Arranque y Envión, Lanzadores de Bala, Martillo, Disco por su explosividad.

Coordinación Dinámica General: capacidad que tiene una persona para mover todo su cuerpo de manera armónica y eficiente, en situaciones que requieren desplazamientos globales, cambios de dirección, saltos, giros, carreras etc. Ejemplos: Atleta carrera con obstáculo, Gimnasta Rítmica con cinta y aros.

Coordinación Óculo-Manual: capacidad de sincronizar la vista con los movimientos de la mano para realizar acciones precisas. Implica percepción visual más control motor fino, se utiliza en gestos de precisión, puntería y manipulación de objetos. Ejemplos: Basquetbolista tirando al aro, Arquería apuntar y soltar la flecha.

Coordinación Óculo-Pedal: capacidad de sincronizar la vista con los movimientos de los pies y las piernas para ejecutar acciones motrices. Implica percepción visual mas control de las extremidades inferiores, fundamental en los deportes de golpeo, conducción y desplazamiento con precisión. Ejemplos: Futbolista pasar y recibir, Atleta de salto en largo sincronizar la carrera y batida.

Coordinación Fina: capacidad de realizar movimientos pequeños, precisos y controlados, generalmente con la manos, dedos y cara. Se relaciona con la habilidad de precisión y control, implica músculos pequeños, muy vinculado al ojo y la motricidad manual. Ejemplos: Tenista de mesa ajustando sus golpes rápidos, Tiro de pistolas al centro.

Coordinación Gruesa: capacidad de realizar movimientos amplios, globales y de grandes grupos musculares, implicados brazos, piernas y tronco. Se relaciona con equilibrio, saltos, carreras y desplazamientos, implica músculos grandes, fundamental en deportes de resistencia, fuerza y movimientos globales. Ejemplos: Nadador coordinando brazada y patada, Voleibolista saltando y rematando.

La Coordinación se integra dentro de las Capacidades Coordinativas porque: controla y regula el movimiento, depende del Sistema Nervioso Central, constituye la base sobre la cual se desarrollan y optimiza las demás capacidades motoras condicionales, permite la adaptación motriz en contextos cambiantes, lo cual es esencial tanto para la vida cotidiana y práctica deportiva.

En definitiva, la coordinación constituye un puente entre lo físico y lo funcional, entre lo que el cuerpo es capaz de hacer y lo que la situación exige, se traduce en movimientos mas fluidos controlados y efectivos.

Autor: Prof. Diego Banquero (diegobanquero@yahoo.com.ar)